¿PARA QUE RECOBRAR UN BUEN ALINEAMIENTO CORPORAL Y VERTEBRAL?

Todo lo que refleja nuestro cuerpo y como lo manifiesta nos habla de la totalidad del ser que somos. Nos muestra lo que privilegiamos a favor o no de nuestra esencia, cómo nos “gestionamos” a diario comprometiendo nuestra salud física, emocional, mental y nuestro bienestar general.

Nuestra postura – y por ende nuestro alineamiento vertebral – es la suma de improntas genéticas pero, sobre todo, de recuerdos, aprendizajes y experiencias que han generado unas creencias que lo condicionaron a lo largo de los años. Evidencian donde hay “infelicidad en nuestro cuerpo, qué tipo de relación cultivamos con este, y donde se distorsionó la conexión induciendo una pérdida de placer debido a “imposiciones” que no le corresponden.

Nuestro cuerpo no está fijo. Se transforma a medida que crecemos y envejecemos según nuestro grado de consciencia y el cuidado que le otorgamos.

Cada postura se configura a partir de impulsos reactivos que generan movimientos corporales específicos, “en exceso de”, “en defecto de”, “en ausencia de”, hacia fuera o hacia dentro, hacia arriba o hacia abajo, en la parte posterior o anterior del cuerpo, en sus lados…

Un cuerpo demasiado laxo, tenso, rígido, un cuerpo prisionero de una postura fija desalineada o “fragmentada”, una columna vertebral “rígida” o con poca flexibilidad, revela la presencia de estrés. Un estrés que se plasma en incomodidad, malestares o dolores de todo tipo que acaban deformando o desequilibrando la postura.

Nuestra postura es como es y sirve juzgar, criticar o despreciar la forma que adoptó, ya que cada persona tiene sus razones para haber configurado su postura tal como se “muestra” y se vive, aunque lo que se le impuso la alejara de su diseño original. Sin embargo, propiciar nuevos hábitos que reconecten progresivamente  con la naturaleza primigenia de nuestro cuerpo puede permitir  experimentar cada vez más placer al “habitarlo” y gozar de una armonía interna creciente vibrando en la salud, lo que será el objetivo central de estos talleres.

CONTENIDO DE LOS CURSOS

En estas propuestas se realizarán secuencias de movimientos adaptados a cada temática, ejercicios de sensibilización específicos para flexibilizar la columna y recobrar un alineamiento corporal a favor del bienestar general.

Para ello se propondrán pistas de enfoques que incrementen la conciencia corporal y las percepciones sensoriales y que favorezcan el descubrimiento paulatino de lo que no pertenece a nuestro cuerpo, lo que le “sobra”, lo que sigue manteniendo las distorsiones y alteraciones que coartan su equilibrio, develando de a poco lo que hacemos y producimos a diario “en contra”.

Se aprenderá cómo despojarse de los “falsos cuerpos” creados, desde lo más evidente hacia lo más sutil.

En cada “bloque de indagación” se prestará atención a ciertos aspectos en particular, pero la globalidad de nuestro cuerpo será siempre considerada.

En todos se buscará activar, potenciar y equilibrar la respiración y la circulación de la energía; interconectadas e implicadas en cualquier limitación, tensión o estrés corporal.

Como los cambios duraderos se producen con una práctica sostenida, se brindaran unas pautas sencillas que puedan ser integrados a nuestra cotidianidad con facilidad, sin esfuerzo; propuestas que anclan unos hábitos que él solo cuerpo buscará mantener por saber lo que le conviene verdaderamente de lo que no.